Geriatría: definición y causas
La geriatría es la especialidad médica centrada en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de las enfermedades asociadas al envejecimiento. Requiere tener en cuenta múltiples factores, desde deficiencias orgánicas —como las cardíacas, renales o hepáticas— hasta trastornos sensoriales (pérdida de audición o visión) y alteraciones cognitivas (deterioro del juicio, demencias). Por eso, su abordaje debe ser integral: médico, psicológico y también social.
Con el aumento de la esperanza de vida —actualmente de 81 años para los hombres y 86 para las mujeres— la geriatría se enfrenta a un número creciente de patologías asociadas a la edad, conocidas como enfermedades geriátricas. Sin embargo, es importante recordar que la edad no es una condena: muchas de estas enfermedades pueden prevenirse o su progresión puede ralentizarse mediante la prevención y el mantenimiento de un sistema inmunitario sano en los pacientes mayores. De hecho, algunos estudios demuestran que el envejecimiento inmunitario se asocia con mayor frecuencia de aparición de:
- Trastornos articulares (artrosis, osteoporosis, artritis reumatoide…)
- Cánceres
- Enfermedades crónicas y neurodegenerativas (como el Parkinson o el Alzheimer)
- Enfermedades autoinmunes
- Infecciones recurrentes
Además, diversos factores pueden favorecer la aparición de estas patologías e incluso acelerar el envejecimiento del sistema inmunitario. Entre ellos se encuentran la contaminación, el estrés crónico, la disbiosis, las infecciones crónicas (como el citomegalovirus), las carencias nutricionales, la falta de ejercicio o el aislamiento social.
Relación con el sistema inmunitario
El buen funcionamiento del sistema inmunitario disminuye con la edad. A medida que envejecemos, se producen una serie de cambios celulares y moleculares que pueden afectar la calidad de la respuesta inmunitaria, aumentando la predisposición a múltiples enfermedades. El envejecimiento del sistema inmunitario, conocido como inmunosenescencia, está relacionado con un estado inflamatorio crónico (inflammaging en inglés) que conlleva un aumento del estrés oxidativo, una disminución de la inmunidad celular (especialmente de los linfocitos T y B) y el acortamiento de los telómeros.
Por eso, mantener un sistema inmunitario equilibrado y funcional es clave para un envejecimiento saludable. Esto no solo mejora la calidad de vida, sino que también ayuda a prevenir o retrasar la aparición de múltiples enfermedades relacionadas con la edad.
Tratamientos existentes para las enfermedades geriátricas
Las personas mayores pueden presentar patologías diversas: en promedio, los pacientes mayores tienen seis patologías. A menudo, estas son más complejas que las de pacientes más jóvenes, lo cual requiere el uso simultáneo de varios medicamentos (conocido como polifarmacia).
Aunque la geriatría es una disciplina que aborda al paciente de forma integral, la medicina trata, cura en algunos casos o al menos estabiliza diversas enfermedades, pero no siempre actúa en la prevención.
Prevenir y restablecer el equilibrio inmunitario con microinmunoterapia
La microinmunoterapia es una herramienta terapéutica que tiene como objetivo apoyar el sistema inmunitario, tanto en prevención como en tratamiento, mediante el uso de sustancias inmunomoduladoras en dosis bajas y muy bajas, con el fin de optimizar su capacidad de funcionamiento.
Bien tolerada por el organismo, incluso en los pacientes de mayor edad, la microinmunoterapia ofrece soluciones para muchas de las patologías frecuentes en personas mayores, ya sean neurológicas o sensoriales, osteoarticulares, digestivas, cardiovasculares, renales o autoinmunes, como por ejemplo:
- Degeneración macular relacionada con la edad (DMRE)
- Enfermedad de Alzheimer
- Osteoporosis
- Artrosis
- Enfermedad de Parkinson